Las nuevas tecnologías tienen una gran incidencia en la forma habitual que realizamos muchas tareas cotidianas como las compras, las comunicaciones, los trámites con las administraciones públicas o el ocio. Trabajar en la nube es algo habitual hoy en día, rompiendo las limitaciones del espacio y del tiempo a la hora de utilizar aplicaciones o acceder a información.
Desde consultar el correo electrónico o almacenar imágenes y documentos online, hasta utilizar plataformas de trabajo en la nube, el cloud computing ha revolucionado la manera en la que gestionamos la información, cómo trabajamos, y en definitiva, cómo utilizamos internet.
Qué significa trabajar en la nube
Cuando hablamos de trabajar en la nube nos referimos a la forma en la que se accede a datos y se utilizan programas o aplicaciones que no se encuentran en el propio dispositivo, sino en un equipo o servidor remoto al que se accede a través de internet.
Trabajar en cloud es posible gracias a la existencia de proveedores de servicios que utilizan modelos como SaaS (software as a service), PaaS (platform as a service) o IaaS (infraestructure as a service).
Entre las principales ventajas de trabajar en la nube tenemos:
- Acceso a la información y aplicaciones en cualquier momento y desde cualquier ubicación.
- Posibilidad de utilizar diferentes dispositivos (independencia del sistema operativo).
- Mayor seguridad al utilizar última tecnología y herramientas de ciberseguridad, además de otros sistemas de protección como backups automatizados, servidores replicados o disaster recovery.
- Servicios escalables, se paga por lo que realmente se necesita y se puede incrementar el nivel de servicio en cualquier momento.
- No es necesario preocuparse por licencias de software, instalación, mantenimiento o actualizaciones (es responsabilidad del proveedor del servicio contratado).
Aplicaciones en la nube, qué es
Las aplicaciones cloud son programas que se ejecutan en un servidor remoto y a los que el usuario puede acceder desde su propio dispositivo, y utilizarlos sin necesidad de realizar una instalación local. Junto con el almacenamiento de datos, las aplicaciones cloud forman los servicios habituales que utilizan las empresas para trabajar en la nube.
Consejos para empezar a trabajar en la nube
Veamos cómo trabajar en la nube para una empresa que decide dar el salto y migrar al cloud sus datos y sistemas informáticos:
Estudiar y planificar la migración
Lo primero que debe realizar una empresa antes de migrar al cloud es saber qué significa trabajar en la nube. Se trata de un cambio importante en la forma de hacer las cosas en el negocio y será necesario eliminar o modificar muchas de las tareas habituales del día a día.
Esta transformación necesita de un estudio previo de la situación del negocio, la definición de los objetivos que se persiguen con la migración y una planificación de todas las fases a seguir, así como los servicios cloud que se van a contratar.
Seleccionar un buen proveedor en la nube
Un paso fundamental a la hora de trabajar en la nube es la elección del proveedor de servicios y las aplicaciones en la nube y servicios cloud que se van a contratar.
Contratar un plan como los que ofrecemos en Clouding 360 es una gran alternativa para comenzar a trabajar en la nube de forma rápida, eficiente y sencilla, sin necesidad de pasar por un proceso complejo y traumático de migración que pueda afectar a la actividad diaria de la empresa.
Integración con otras herramientas
Aunque trabajar en la nube significa cambiar procesos y tareas por nuevos sistemas con acceso online, es interesante que se puedan conservar herramientas útiles que ya se utilizaban en la empresa, como pueden ser hojas de cálculo Excel, por ejemplo. En este caso se puede apostar por Office 360 para poder seguir trabajando de forma habitual con Excel, pero en un entorno cloud que permite el acceso desde cualquier ubicación y a cualquier hora, utilizando para ello un simple navegador web.
Pagar solo por lo que se usa
Es importante seleccionar bien las herramientas y servicios cloud que se van a contratar para garantizar qué solo se paga por lo que se va a utilizar realmente en la empresa. La ventaja de los servicios en la nube es que se pueden seleccionar solo los que realmente se necesitan, disminuyendo el coste (se paga una tarifa periódica inferior por el servicio).
Si la empresa necesita ampliar algún servicio o utilizar una nueva herramienta, se puede contratar en cualquier momento de forma rápida y sencilla.
Formación del personal
Dar el salto a la nube implica utilizar nuevas aplicaciones y servicios lo que supone un cambio radical en muchas tareas y procesos del negocio. Este tipo de cambios suelen producir efectos de rechazo en el personal por miedo y desconocimiento.
Apostar por una buena formación cloud para los trabajadores es importante para que puedan adaptarse a las nuevas herramientas y servicios, implicarse en el proceso de cambio y saber valorar los muchos beneficios que ofrece la nube, tanto para su trabajo como para la empresa.
Trabajar en la nube es una necesidad para las empresas que quieran ser más productivas y competitivas en el mercado globalizado actual que se caracteriza por su alta dependencia de las tecnologías. El cloud computing facilita el trabajo diario de cualquier tipo de empresa y le permite crecer y aprovechar las tendencias y nuevas oportunidades que se le presentan.
